ÉRASE UNA VEZ………….

Dragones, princesas, Caperucita y el lobo………….. todos esos son personajes que harán que nuestros hijos hagan volar su imaginación y desarrollar su creatividad.

¿Por qué nosotros, COMO PADRES, vamos a dejar escapar la oportunidad de hacerlo junto a ellos?  

Los cuentos nos pueden acercar a mundos fantásticos y harán que los niños aprendan sin darse cuenta. Dedicar un momento del día a ver un cuento con ellos, va a favorecer que nuestros hijos vayan adquiriendo el lenguaje, ampliando su vocabulario, aprendiendo nuevos conceptos, estados de ánimo… Despertará su curiosidad por conocer más, hará que mantengan y aumenten su atención y favorecerá que en un futuro leer sea placentero para ellos.

Pero hay algo aún más importante que todas esas ventajas que ya hemos mencionado. Que veáis cuentos junto a vuestros hijos hará que sea un MOMENTO FAMILIAR. Os ofrece la posibilidad de dedicar un rato del día a vuestros hijos, fuera de las obligaciones diarias, de los mandatos y de las tensiones. Ahora sólo importáis vosotros y ese momento de disfrute en el que podéis compartir historias y hablar juntos de aquello que os une y os preocupa. Si dedicáis un poco de vuestro tiempo a vuestros hijos haréis que os sientan más cercanos y se sientan importantes, puede ser un bonito momento de comunicación y de complicidad y hará que tengan mayor confianza en todo lo que les rodea.

No lo viváis como una obligación, sino como un momento placentero. Pero tened en cuenta que no en todas las edades convienen los mismos cuentos. Con los más pequeños podéis ver libros de imágenes. Les gusta señalar para que vosotros le nombréis y más adelante querrán ser ellos los protagonistas y poder indicaros dónde está aquello por lo que les preguntáis. Les suelen gustar mucho los cuentos de animales y según van creciendo tienen interés por aquellos cuentos en los que hay que destapar puertas o viñetas para descubrir nuevos objetos.

A partir de los dos años ya son capaces de seguir historias sencillas. Los temas que les interesan son muy variados. Les gustan los cambios de voz, las onomatopeyas, los sonidos, los gestos, las pausas de suspense… No tengáis miedo a teatralizar los cuentos un poco porque les divertirá y haréis que su interés sea mayor. A esas edades les gusta mucho que se mantenga un esquema de repetición (de palabras y objetos) y eso hará que el cuento tenga una mayor consistencia y les ayudará a seguir el hilo del cuento. Además, recordad que es un momento para compartir así que dejad que ellos también participen invitándoles a decir aquellas frases que se repiten a lo largo del cuento o haciéndoles preguntas.

Ahora que las Navidades están tan cerquita os animo a que en la carta a los Reyes Magos o a Papá Noel pidáis un cuento para vuestros hijos. Que bajo el árbol de Navidad, junto a su zapato, puedan descubrir un mundo de fantasía junto a vosotros.

Para hacer feliz a un niño no se necesitan grandes regalos. Aquí os sugiero el cuento “No es una caja”, de la Editorial de Kalandraka, porque a veces una caja vacía y un buen cuento pueden ser el mejor regalo. Con ello podréis hacer que un niño disfrute durante horas y horas. 

¡¡¡ Por cierto !!! No sé si os habéis enterado pero Rudolph, el reno de Papá Noel, se ha hecho daño en una patita y no podrá repartir muchos juguetes. Papá Noel ha enviado un mensaje a todos los niños para que lo tengan en cuenta y no piden muchos regalos. Si todavía no lo habéis visto, aquí os lo dejo para que se lo hagáis llegar a los más peques de la casa.

Y después de daros alguna idea para disfrutar junto a vuestros hijos... 

COLORÍN COLORADO ESTE CUENTO SE HA ACABADO